26 Agos 2015.- Desde la creación de hot teams como usinas de ideas, pasando por la instalación de un día especial dedicado a la creación libre, hasta la disposición física de los escritorios y los empleados en las oficinas, las compañías líderes saben que innovar puede ser la clave para un crecimiento sustentable y, por eso, le revelaron a Management cuáles son sus claves para fomentar la creatividad en el día a día.
Las empresas que operan a nivel local saben que esta capacidad estratégica para mantenerse competitivas cobra cada vez mayor relevancia porque la experiencia ha demostrado que una organización creativa es, sin dudas, mucho más efectiva.
En ese sentido, Martín Migoya, CEO y socio fundador de Globant, asegura que “para que una empresa pueda trascender, es necesario que fomente la creatividad en todos sus ámbitos. Tiene que ser un valor intrínseco que toque a cada persona de la organización y eso se logra generando una cultura de la innovación”.
En la firma, por ejemplo, esto se fomenta a partir de acciones como crowdsourcing de ideas al inicio de un proyecto nuevo; eventos Flip-thinking en los que se abordan tópicos relacionados con la creatividad y la innovación de la mano de líderes de opinión de las ciencias, artes, industria y tecnología; o los Hackathons a los que se invita a programadores, diseñadores e ingenieros de Globant y de otras empresas a colaborar intensamente en un desafío tecnológico.
Para Western Union – Pago Fácil, la creatividad, también, es un valor fundamental y forma parte de las competencias corporativas de la empresa. Soledad Villaruel Larre, directora de Recursos Humanos de la firma, señala que “el proceso abarca a toda la organización y tiene que estar facilitado por ella”, por ejemplo, a partir del desarrollo de “proyectos transversales, espacios para propuestas sobre procesos, servicios, productos, y premios a quienes proponen cambios y mejoras”. Y añade: “La creatividad debe ser parte de la cultura de la compañía y se debe comunicar desde el proceso de inducción”.
En esta misma línea de pensamiento, Érica Zamora, directora de Selección, Capacitación, Desarrollo, Comunicaciones Internas y Clima de Cervecería y Maltería Quilmes, agrega que, ese pensamiento innovador, “no se produce de forma individual y aislada, sino que surge de la interacción entre los pensamientos de una persona con su entorno y otros pares”.
Pero, ¿por qué ese valor, hoy, es tan importante al interior de la cultura empresarial? “Actualmente, el capital humano e intelectual es la esencia del posicionamiento de una empresa en el mercado. La creatividad e innovación ocupan un lugar privilegiado, ya que están en la manera en que las organizaciones utilizan y reutilizan su conocimiento, promueven ideas, innovan, desarrollan nuevas estrategias y metodologías, y otorgan a la compañía un valor diferencial”, explica la ejecutiva.
El cambio comienza desde adentro
Más allá de las definiciones teóricas y las declaraciones de principios, lo cierto es que los beneficios de aplicar políticas que fomenten el desarrollo de las capacidades creativas en el interior de las empresas produce resultados concretos. Y todo comienza con la motivación de las personas que conforman el capital humano de las compañías.
Entonces, en el ámbito de lo concreto, la experiencia es la que dicta. Facundo Almirón, director de Capital Humano de Laboratorio Savant, explica que aplican programas de creatividad a todos los públicos internos con procedimientos que involucran la creación de proyectos y premios. Para eso, se destinan presupuestos específicos y responsables para su gestión.
“Mediante este programa, buscamos que nuestros colaboradores desarrollen ideas innovadoras y soluciones eficaces en categorías relacionadas con áreas de calidad, comercial, operaciones y ambiente de trabajo.
Desde su lanzamiento, se han presentado 645 proyectos, hemos implementado 459 y seguimos trabajando para estimular la cultura creativa e implementar el aprendizaje organizacional”, cuenta Almirón.
Como para la creatividad no hay reglas ni corsets, la forma en que se aplica esta herramienta es variada, y depende de cada empresa, sus características y necesidades.
Banco Galicia, por ejemplo, está alineado a estos procedimientos y, desde principios de 2011, implementa un programa de innovación que busca fortalecer el desarrollo creativo de los integrantes de la organización.
Rodolfo Zimmermann, gerente de Comunicación Interna y Cultura de la entidad, relata que, para lograrlo, se lanzó una convocatoria interna para la inscripción en hot teams en los que se piensa el futuro de la organización y diversas problemáticas desde una óptica horizontal y un ambiente relajado. Cada grupo está compuesto por 12 colaboradores que se reúnen semanalmente para buscar nuevas iniciativas.
Además, crearon un sitio corporativo para exponer nuevas visiones y establecieron el Día de Innovación Galicia, una jornada especial en la que se reúnen empleados de todo el país para generar soluciones creativas. Programa de Jóvenes Profesionales, música dentro de las sucursales y regalos especiales para los cumpleaños de los empleados son algunos de los resultados de estos encuentros anuales.
Bajo el mismo concepto, DIRECTV creó design labs con grupos de trabajo especiales orientados a generar ideas, aplicar la creatividad para resolver desafíos concretos e identificar perfiles innovadores dentro de la compañía. “La idea fue diferenciarnos a través de llevar a otro nivel tanto el diseño de la experiencia como la resolución de problemáticas específicas en el servicio”, explica Fernando Straminsky, VP Customer Experience de la firma y creador de esta iniciativa.
Facundo Ruiz, jefe del Proyecto, puntualiza: “Lo que hacemos en estos talleres es cumplir un rol facilitador, que guíe y acompañe a los participantes, con distintas técnicas y metodologías, a explorar formas de pensamiento alternativas”. Y añade: “Más allá de que los resultados para el negocio siempre son positivos, la experiencia en estos talleres resulta muy inspiradora porque no solo se logran impactos en las oportunidades que se persiguen para el negocio, sino que ayuda a construir un clima laboral de incentivo”.
Otra de las compañías que hace varios años viene innovando en este ámbito es Danone. Sofía Lobo, gerente de Comunicaciones Externas, remarca la importancia que le otorgan a la creatividad desde el interior de la organización y señala que “un ejemplo de esto es el Latam Campus, el encuentro de learning regional que se realiza una vez al año a nivel mundial”. Durante la semana que se desarrolla el campus, “más de 500 danoners concurren a actividades de desarrollo y entrenamiento fuera de la oficina”. La oferta académica incluye, por ejemplo, disertaciones a cargo de ejecutivos internos y de expertos externos en temas como creatividad, innovación y comunicación en crisis.
Walmart Argentina también se sumó a este grupo de empresas focalizadas en la creatividad de su capital humano y propuso una iniciativa que incluye aspectos de la vida social de los empleados. El objetivo es “disminuir los obstáculos y barreras de cualquier proceso creativo a partir de la promoción de ambientes estimulantes, inclusivos y diversos”, resalta su director de RR.HH., Christian Bernal.
Su propuesta consiste en conciliar la vida familiar con el trabajo, así como garantizar la inclusión igualitaria para todos los sectores. “Esto es clave para eliminar obstáculos, presiones o fantasmas. Sobre todo, porque, para poder crear y trabajar sin temor o culpa, hay que sentirse libre de presiones”, añade el ejecutivo. En este punto, algunas de las acciones contemplan una serie de beneficios que van desde licencias part-time para madres, licencias por paternidad extendidas y hasta días extra por casamiento; ayuda para guardería y jornadas de viernes flexibles, entre otras.
Kimberly-Clark Argentina también introdujo nuevas formas creativas en el quehacer diario con diferentes innovaciones. Chintia D´Agata, gerente de Recursos Humanos, explica: “Es un nuevo modelo de trabajo compartido y sustentable, que rompe con el modelo tradicional y se basa en tres pilares: flexibilidad, integración y movimiento”.
Esos pilares que guían el proceso no quedan en el terreno de lo abstracto, sino que se hacen palpables y predisponen la incursión en las tareas laborales con una nueva mirada, como sucede, por ejemplo, en el espacio físico que la compañía inauguró, el año pasado, en Puerto Madero. “Las oficinas abandonan el modelo de escritorios individuales o boxes para organizarse en mesas de trabajo de entre cuatro y seis personas que dan soporte a un mismo proceso. El espacio se completa con un amplio lugar de trabajo común, donde reinan los sillones con mesas bajas, livings, banquetas, cabinas telefónicas y espacios de proyección, generando un ambiente más distendido e integrado”, describe la ejecutiva.
El consumidor: fuente de inspiración
Cada vez son más las empresas que se suman a este desafío de repensar el capital humano y considerarlo como el valor diferencial de cada compañía. Pero, para que el círculo virtuoso se complete, hay que mirar al exterior y buscar un rebote positivo de ese fortalecimiento interno.
En este punto, Lisando Echeverría, director de Recursos Humanos, Legales e Institucionales de Scania, enfatiza que “la capacidad creativa de los empleados es un factor fundamental para el cumplimiento central de nuestro objetivo, que es el desarrollo de soluciones eficientes para nuestros clientes”.
La automotriz, por ejemplo, puso su creatividad al servicio de mejorar la disponibilidad de repuestos de baja rotación que, usualmente, demoraban unos 10 días hasta llegar al cliente que lo demandaba. “Por este motivo, se propuso consultar la disponibilidad de piezas de baja rotación en stock entre los concesionarios Scania y gestionar un circuito de recompra, que reduciría el tiempo de entrega en el concesionario comprador y mejoraría la rotación de repuestos en el concesionario proveedor, satisfaciendo al consumidor de manera casi inmediata”, detalla.
Es que cada decisión que se ejecute en el interior de la empresa repercutirá en la relación con el consumidor. En contextos tan competitivos como los que plantea el mercado actual, la creatividad para atraer y mantener al público objetivo aparece como un aspecto fundamental a cuidar. “Los consumidores son cada vez más exigentes y sus demandas cambian rápidamente. La capacidad de adaptación de las empresas es un elemento fundamental que es necesario interpretar y desarrollar”, suma Zamora.
Luciana Peiró, jefa de Marketing y Comunicaciones de la multinacional proveedora de tecnología SFK, analiza que “aquellas empresas que puedan resolver los problemas de los clientes de forma creativa, ayudando a reducir costos y mejorando la calidad de sus productos, serán las que se diferencien a largo plazo”.
“De nada sirven la creatividad o invención si no son aplicables al valor percibido por el cliente y la capacidad de competir en la industria. La innovación y la creatividad no son una opción, son una necesidad para sobrevivir en un entorno cada día más competitivo”, sentencia la ejecutiva.
Damian Cherñavsky, director de Recursos Humanos de Roche Argentina, también enfatiza este punto, y señala que los valores de creatividad e innovación “son parte de la esencia” de la compañía y atraviesan todas sus áreas, porque “su propósito es anticiparse a las necesidades de los pacientes”.
Bajo este concepto, Roche desarrolla, desde hace varios años, los Pharma Next Awards, con los que fomenta la creatividad de sus empleados. Entre sus resultados más significativos, se encuentran iniciativas que lograron acelerar el acceso de los pacientes a los tratamientos, métodos para mejorar la calidad de los procesos de manufactura y actividades para favorecer el compromiso de los empleados con el propósito de la firma.
IBM es otra de las empresas que otorga principal relevancia a la creatividad interna con vistas a resultados externos. Ignacio Vaca de Osma, director de Marketing, Comunicaciones y Ciudadanía Corporativa de la Big Blue, agrega que, con ese objetivo, la firma fijó “un propósito, tres valores y nueve prácticas que guían el trabajo de todos los empleados”. Entre esas prácticas, se pone énfasis en la innovación para generar una escucha del cliente, compartir el conocimiento con los pares, reinventar a la empresa, plantear ideas originales y apreciar la diversidad de pensamiento.
“Nuestras nueve prácticas son los pilares para impulsar la creatividad, la colaboración y la innovación que impacta en la vida de las personas”, considera Vaca de Osma.
Así las cosas, la creatividad traspasó los ámbitos meramente publicitarios para convertirse en un aspecto fundamental en el interior de cada empresa. El desafío, entonces, consiste en encontrar procedimientos y herramientas originales que permitan llevar a cabo tareas de una manera alternativa con resultados que diferencien a las compañías en el mercado.
Fuente: / cronista.com.ar