01 mar 2017.- Junto con el blanqueo, a fin de mes vencen la posibilidad para quienes no hicieron uso del sinceramiento de obtener el cerrojo fiscal y la calificación de “contribuyentes cumplidores”, dos aspectos muy importantes para la planificación fiscal y que no deben dejarse pasar por inadvertencia.
La Declaración Jurada de Confirmación de Datos del artículo 85 de la Ley de Blanqueo, para quienes no se presentaron al mismo, “tiene mucha utilidad si el contribuyente no tiene ningún bien ocultó”, explicó César Litvin, del estudio Lisicki, Litvin & Asoc, ya que si vendió en 2014 un bien adquirido en 2010, pero la declaración de impuestos del ejercicio cerrado el 31 de diciembre de 2015 es impecable, la AFIP ya no podrá reclamarle, ejemplificó.
En cuanto a la calificación de “buen contribuyente”, con ella se obtiene la exención del Impuesto sobre los Bienes Personales en 2016, 2017 y 2018. Y para esto, consideró Litvin, no hace falta ser “sobresaliente, basta con requisitos bastante moderados”. Mientras tanto, “es muy útil para la planificación fiscal”. Puso el ejemplo de alguien que blanquea bienes y dona una parte a los hijos que son contribuyentes cumplidores. Por esos bienes del patrimonio familiar no habrá que pagar el impuesto a los activos.
Pero, puntualizó Litvin, se debe ser puntilloso antes de presentarse a pedir la calificación de contribuyente cumplidor, ya que si luego de que hizo el pedido, la AFIP le hace un ajuste, se le cae el premio.
Fuente: / cronista.com.ar