10 set 2015.- A Daniel Scioli, el presidenciable del FpV cada uno de los 8.424.749 votos que obtuvo en en las primarias del 9 de agosto le costó 4,6 pesos. Al frente de Cambiemos, que llevaba como candidatos a Mauricio Macri, Elisa Carrió y Ernesto Sanz, cada sufragio (de los 6.595.914) le salió más caro: 5,5 pesos. La Justicia Nacional Electoral difundió ayer la mayor parte de los informes de financiamiento de las alianzas que compitieron en las PASO. Con la ausencia de los documentos de UNA, que consagró como postulante a Sergio Massa, también fueron publicados los balances del Progresistas de Margarita Stolbizer y Compromiso Federal de Adolfo Rodríguez Saá.
En su informe de 56 páginas, el FpV declaró ingresos por $ 39.892.111 y egresos de 39.921.296 (la mayor parte destinada a la propaganda), por lo que la campaña del gobernador bonaerense arrojó un déficit de 29.185 pesos. Entre el dinero que ingresó, el sciolismo declaró “aportes públicos” por $ 13.874.051 (9 millones “extraordinarios” y otros 4 para la impresión de las boletas). El resto fueron contribuciones privadas por un total de $ 26.018.060.
Entre los aportantes, con sumas que en algunos llegan a los $ 50 mil, figuran varios empleados de planta de la gobernación bonaerense, la mayoría de sus segundas líneas. Hay desde sciolistas de siempre como Enrique Moltoni (que cubría las carreras de offshore desde Nuevediario y hoy es director de Culto) que aportó $ 20 mil; pasando por el ex vocero y actual presidente del Banco Provincia, Gustavo Marangoni, que puso $ 49 mil; hasta los naranjas más actuales, como la ministra de Economía, Silvina Batakis, que puso 26 mil pesos. También figuran en el listado empresarios, como Manuel Ribeiro ($ 40 mil) y el amigo del ex motonauta Lautaro Mauro ($ 20 mil), uno de los pocos con acceso a Villa La Ñata que contribuyó. No están el dúo Pimpinela, ni Ricardo Montaner, ni “Nacha” Guevara, ni tampoco el “Rey de la Carne”, Alberto Samid.
En cambio, hay un par de sorpresas. El ex jefe de la Bonaerense, Juan Carlos Paggi, que dejó la policía en 2011 salpicado por la desaparición de la familia Pomar y el asesinato de Candela Rodríguez, contribuyó con $ 20 mil en efectivo. Y el ex ministro de la Alianza, Chrystian Colombo, hoy volcado a los negocios pero que asesoró a Martín Lousteau en su reciente campaña porteña contra el PRO, puso 40 mil pesos.
Cambiemos declaró ingresos por $ 35.802.269 y gastó más de lo recaudó ($ 36.703.444), lo que dejó un rojo de poco más de 900 mil pesos. Como el oficialismo, la mayor parte del dinero se fue en publicidad: $ 20.929.149, con la mitad volcada a internet. Macri sumó 753 aportantes privados que pusieron $ 22.060.500. Más austeros, Carrió juntó $ 162.900 y Sanz $ 390.500. El Jefe de Gobierno porteño hizo una colecta entre sus ministros, que pusieron $ 60 mil cada uno, con la insólita excepción del jefe de gabinete y electo alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Hay sumas individuales más altas que en el FpV. Por ejemplo, una joven Brenda Erika Osso, de 29 años, abonó $ 95 mil; lo mismo que Miguel Angel González Re.
Por su parte, Progresistas declaró que gastó lo que recaudó:
$ 10.694.593. Por lo que cada sufragio que sacó Stolbizer en las primarias costó 13,9 pesos. Según el informe, no recibieron aportes privados sino que costearon la campaña con aportes públicos y transferencias de otros organismos.
Y el único que logró superávit: el puntano Rodríguez Saá declaró haber gastado $ 6.995.915
($ 15 por sufragio) con ingresos por $ 9.807.415. Por lo que le sobraron $ 2,8 millones para las generales. Informó sólo 10 contribuyentes privados, uno de ellos con $ 745 mil en “Especie”.
Fuente: / cronista.com.ar