17 feb 2017.- El grabador está apagado. Pide un favor. “Quiero dejar en claro que el Gobierno tiene un capital humano muy valioso. Con alto grado técnico y, además, moral, de integridad. Pero muy inexperto, con poca experiencia”, advierte. “Lo único que quiero hacer con mis opiniones es colaborar. Por eso, les pido que miren un poco más la Historia y traten de aprender, rápido, a gobernar. Será un año clave para que terminen de conformar un equipo que se afiance en 2018 y logre resultados concretos en 2019”, aconseja.
Domingo Cavallo no es ingenuo. Sabe que sus palabras serán aceptadas en silencio o –al menos, públicamente– rechazadas. Pero nunca, ignoradas. Como Ministro de Economía, conoció cielo e infierno. Su ostracismo cumplió ya 15 años. A sus 70, ya sin vocación de retorno a la vida pública, mira las cosas desde otro lugar. Este mes, la editorial británica Routledge –especializada en textos académicos– habrá publicado “Las reformas económicas de la Argentina de los ’90, en una perspectiva contemporánea e histórica”, que escribió con su hija, Sonia Cavallo-Runde. Porque El Mingo, siempre, tiene algo para decir. Quien quiera oír, que oiga.
¿Cómo hizo para abordar hechos en los que usted fue protagonista?
Cuando decidí escribir el libro, revisé uno que había leído: la historia de la Segunda Guerra, narrada por (Winston) Churchill. Vi que él usó la primera persona toda vez que se refería a sí mismo. Decidí imitarlo. Examinando las evidencias que surgen de la información, de los datos. Pero incorporando las vivencias que sólo yo puedo tener porque estuve ahí.
¿No corrió el riesgo de que se convirtiera en un libro de memorias?
No, no es un libro de memorias. Es uno de historia económica. Que, de 1989 en adelante, se mezcla con testimonios. Pero no es una autobiografía. No me refiero a mi vida. Por supuesto, introduzco mucho análisis político, sociológico, ideológico, para explicar por qué se tomaron determinadas decisiones. Y quiénes estaban a favor y en contra, o qué intereses hubo que vencer.
¿La investigación le permitió abordar algunos hechos desde otra perspectiva?
Me resultó muy interesante trazar paralelismos y diferencias con otros episodios. Hay muchas cosas de la historia argentina que ayudan a entender mejor lo que pasó en los últimos 25 años. Por ejemplo, la tendencia de muchos actores de la sociedad a sacarse de encima los problemas recurriendo al golpe inflacionario. Es algo reiterado desde mediados de los ’40. No antes. Porque, hasta entonces, el país había puesto mucho énfasis en aplicar políticas que significaran moneda sana. Cuidar la estabilidad monetaria, además de los precios. Pero, ya en la época de las guerras civiles, desde 1810 a 1852, hubo golpes inflacionarios como forma de resolver problemas de endeudamiento y de financiamiento.
Fuente: / apertura.com.ar